Mahón es la capital de Menorca y la ciudad más importante de esta isla balear. Cuenta con unos 28.000 habitantes y su puerto es uno de los mejores puertos naturales del mundo. Es cierto que no cuenta con muchísimas escalas, en comparación con muchos otros puertos turísticos del Mediterráneo. No obstante, cada vez más compañías se decantan por hacer escala en esta pequeña y encantadora ciudad menorquina; la última, MSC, que ha confirmado que su MSC Sinfonía hará escala semanal en Mahón hasta el próximo mes de noviembre.
¿Qué podemos ver en Mahón?
En Mahón contamos con un sinfín de visitas interesantes que sin lugar a dudas nos dejarán buen sabor de boca.
Podemos por ejemplo visitar la Fortaleza de la Mola, situada en el mismo puerto. Es el mejor ejemplo de la arquitectura militar del siglo XIX en Menorca, y lo cierto es que resulto ser una estructura decisiva a lo largo de la historia para la defensa de la isla.
En el Museo de Menorca, situado en un precioso y antiguo convento, observaremos un sinfín de objetos del periodo prehistórico de la isla, pues hay que recordar que aquí, como en muchas otras partes de Baleares, se han encontrado diversos yacimientos de interés.
El Bastión de Sant Roc fue construido en el siglo XIV. Era la puerta principal de la muralla que rodeaba la antigua ciudad de Mahón, una estructura defensiva de la Edad Media que fue derribada dejando en pie tan sólo esta imponente puerta.
En cuanto a iglesias y templos, podemos visitar la Iglesia de Santa María, que cuenta con un precioso órgano del siglo XIX de 4 teclas y unos 3.120 tubos. Es justamente aquí donde se celebra el famoso Festival Internacional de Órgano.
Tampoco podemos perder la oportunidad de pasear por la ciudad, embriagarnos con sus calles, degustar sus deliciosos platos de cocina menorquina y mezclarnos con sus agradables ciudadanos.
Claustro del Carmen en Mahón, Menorca
Excursiones para hacer desde el puerto de Mahón
Si contamos con más tiempo, o no tenemos interés de visitar Mahón, siempre podemos realizar algunas excursiones; y es que la ciudad está cerca de algunos enclaves muy interesantes.
Podemos visitar por ejemplo el poblado Talayótico de Trepucó. Este lugar cuenta con más de 5.000 metros cuadrados, es uno de los poblados talayóticos más grandes de toda la isla.
En este lugar, podemos encontrar aun fragmentos de la antigua muralla, dos talayots, los restos de viviendas y el recinto de la taula.
Este lugar quedaría completamente destrozado durante la Segunda Guerra Púnica, algo que obligó a sus habitantes escapar desesperadamente de allí.
Otra visita es la del Fuerte de Marlborough. Fue construido por los británicos en el año 1710 en la Cala de Sant Esteve, en la localidad de Es Castell.
Es uno de los edificios defensivos que más ayudaron en la lucha entre España, Gran Bretaña y Francia por la posesión del territorio.
Por último, también podemos desplazarnos hasta el Talatí de Dalt, situado a tan sólo 4 kilómetros de la ciudad. Es uno de los poblados prehistóricos más importantes de la isla, y en él, aun podremos observar monumentos que fueron construidos nada más y nada menos que en el año 1300 a.C.
En este poblado talayótico encontramos monumentos como el gran talayot, el recinto de la taula, viviendas con cubiertas de losa y cuevas naturales que fueron usadas como lugares de enterramiento.
Lo cierto que además de ser uno de los poblados prehistóricos más importantes de la isla, cuenta con una visita muy entretenida, pues a nuestra entrada se nos suministrará un folleto en el que está cada parte del mismo detallada explicando su función en la época, muy útil y didáctico.