Santo Domingo, capital de la República Dominicana, es una de las escalas de crucero más interesantes del mar Caribe. Los motivos son muchos. Para empezar, está considerada como el lugar del primer asentamiento europeo en América, siendo así la primera sede del gobierno colonial español en el Nuevo Mundo.
La historia de Santo Domingo ha dejado a su paso un sinfín de lugares interesantes para visitar. Algo que perfila una escala cargada de sorpresas. La mayoría de las visitas están ubicadas en la Zona Colonial, declarada Patrimonio de la Humanidad por la Unesco, por lo que no será necesario desplazarse mucho para conocer los rincones más famosos.
¿Qué ver en Santo Domingo?
Una de las atracciones imprescindibles es la conocida como calle El Conde, se trata de una de las primeras calles construidas por los europeos no sólo en Santo Domingo, también en América. Data desde la fundación de la ciudad, allá por 1502. En su día fue la arteria más importante de la urbe. Hoy por hoy sigue siéndolo, regalándonos a su paso, además, la visita de otros elementos de interés como La Catedral, el Cabildo, la Picota o algunas casas de familias importantes de la época.
En tu escala en Santo Domingo tienes que ver también el Baluarte del Conde. Se trata de un baluarte conformado por varios monumentos y lugares, como el Parque Independencia, Puerta de la Misericordia o la Puerta del Conde o Baluarte 27 de febrero.
El Parque Independencia es un lugar histórico. Fue el lugar en el que se desarrolló la independencia dominicana, por lo que cuenta con un sinfín de monumentos relacionados con este episodio del país.
También destaca la Puerta de la Misericordia, conocida también como Puerta Grande o Puerta de Santiago. Históricamente destaca por ser la primera puerta de acceso de Santo Domingo, construida por Rodrigo de Liendo en 1543. También está la Puerta el Conde, un edificio militar del siglo XVII que cuenta con dos cubos macizos con un arco en piedra entre ambos.
Entre las calles Arzobispo Meriño e Isabela La Católica está la Catedral Primada de América, más conocida como Catedral de Santo Domingo. Como no podría ser de otra forma, dada la historia e importancia de la ciudad, esta catedral es la más antigua de toda América. Fue consagrada por el papa Julio II en 1504, y entre otros, destaca por sus sólidas paredes y sus tres puertas, dos de ellas góticas y una tercera plateresca.
En su interior, hay un gran tesoro artístico en forma de retablos, cuadros, ebanistería, mobiliario e incluso lápidas funerarias. Fue, además, el lugar en el que se custodiaron los restos de Cristóbal Colón antes de que supuestamente fueran trasladados al Faro a Colón.
Alcázar de Colón en Santo Domingo
Sigue tu ruta por Santo Domingo visitando el Alcázar de Colón o Palacio Virreinal de Don Diego Colón. Situado también en la Ciudad Colonial, fue construido próximo al río Ozama por Diego Colón, hijo primogénito de Cristóbal Colón. En la actualidad, su interior está reservado al Museo Alcázar de Colón, dedicado a la conservación, exposición y difusión de la vida de la familia del descubridor de América en la ciudad, así como la época virreinal.
Si se trata de visitar museos, lo cierto es que en Santo Domingo hay una amplia lista para ver. Puedes visitar el Museo Naval de las Atarazanas, un lugar plagado de patrimonio artístico sobre arqueología subacuática. También es interesante el Museo de las Casas Reales, dedicado a la época colonial, el Museo de Duarte, en el que se expone la historia de la lucha de la independencia o museos como el Museo de la Historia Natural, el Museo del Hombre Dominicano o el Museo de Arte Moderno.
Fuerte de Santo Domingo
No te olvides de visitar el Malecón de Santo Domingo, conocido generalmente Malecón. Se trata, en realidad, de la avenida George Washington, una gran vía que recorre casi la mitad de la ciudad en paralelo a la costa. Un sinfín de restaurantes, hoteles y lugares de ocio se encuentran a su alrededor, siendo así una zona rodeada de lujo y actividades para todos los públicos.
Sin duda, Santo Domingo cuenta con un sinfín de cosas para ver, siendo así una escala completamente recomendable en un crucero por el Caribe.